Mañana, día 22 de mayo, se celebra la XXXVI edición del Descenso de Nabatas por el río Cinca.
Después de dos años sin poder celebrarse, este año 2022 se retoma la tradición en el Sobrarbe.
Primero fue la fiesta de las nabatas en el río Gállego (24 de abril), entre Murillo y Santa Eulalia, después las del Aragón-Subordán, en Hecho. Ahora les toca el turno a los nabateros del Cinca, que cierran mañana el calendario de los tradicionales descensos en balsas de troncos recordando el viejo oficio del transporte de madera por los ríos.
La tradición del transporte fluvial de los troncos de madera por el río Cinca desde los valles del Pirineo hasta Tortosa en el Mediterráneo, se remonta al siglo XV. Pero debido a la construcción de embalses, ahora únicamente se celebra como reclamo turístico y recordatorio de una tradición.
La recuperación de este antiguo oficio ha sido reconocido como Fiesta de Interés Turístico y Bien de Interés Cultural Inmaterial por el Gobierno de Aragón.
Los nabateros recorrerán los doce kilómetros que separan Laspuña de Aínsa.
El programa de actos incluye otras actividades relacionadas con el tema durante todo el fin de semana, destacando, esta noche, el concierto de la Orquestina del Fabirol, en Laspuña.
Además mañana, antes de la salida de las nabatas, habrá una ofrenda floral en el monumento de Laspuña (8:00 horas), una misa (9:00 horas) y un almuerzo popular (9:30 horas).
La salida de las nabatas está programada a las 11:00 horas, desde el puente de Laspuña, para llegar a Aínsa a partir de las 12:15 horas aproximadamente.
¡Qué ganas de ver como descienden las nabatas de nuevo por el río Cinca!
