Cada año que pasa Martín muestra más interés por Halloween, una fiesta que une disfraces, personajes terroríficos y dulces, una combinación irresistible para la mayoría de niños.
Para ambientar los días de Halloween, hemos decorado la puerta de nuestra casa de una “manera terrorífica”. Hemos convertido la puerta de entrada, en una cara de monstruo.
Para realizarla, hemos utilizado únicamente goma eva de colorblanco y negro, celo ancho, tijeras y pegamento. Hemos recortado las láminas de goma eva a la forma del pelo, boca, ojos, cicatriz y araña.
Una vez todo preparado, lo hemos pegado en la puerta y ¡ya está listo!.
¡No tengáis miedo si pasáis por nuestra casa!
