En otoño, una de las actividades que se realizan en las escuelas infantiles y en los colegios en infantil, es hacer bonitas cestas de otoño con los materiales que se van recolectando y que los alumnos traen a las aulas.
Este año hemos hecho una cesta para casa, que ahora adorna una mesa en nuestro salón.
Con todos los materiales que recogimos el otro día y algunos otros que hemos comprado en una frutería de Sabi, la cesta nos ha quedado súper bonita.
Tiene: piñas, hojas secas, castañas pilongas, palos, un membrillo, una manzana, una granada, nueces, frutos de ciprés y una preciosa calabaza… calabaza que, en las fechas que nos aproximamos, ¡utilizaremos para otra actividad!
No perdamos la ocasión de que los niños conozcan y jueguen con materiales naturales, ya que les ayudan a desarrollar los diferentes sentidos:
- El tacto, mediante la manipulación de las diversas texturas de los materiales.
- La vista, observando y trabajando los diferentes colores, formas, tamaños…
- El olfato, aprendiendo a distinguir los diferentes olores.
- El gusto, aunque no todos los elementos son comestibles, aprovecharemos a conocer los diferentes sabores de las frutas y frutos que sí lo son.
- El oído, conociendo los diferentes sonidos que producen.

¡¡Qué cesta más bonita y completa!!!!
Me gustaMe gusta
Sí, ¡nos ha quedado muy chula!
Me gustaMe gusta