Uno de los juegos que hace tiempo que tiene Martín y que todavía le hace mucha gracia, es una rueda de esas que venden en las ferias, que llevan una pelota dentro.
Se trata de un juego muy divertido para niños pequeños cuando comienzan a andar; posteriormente les sigue llamando mucho la atención ya que emiten sonido al girar la rueda.
Es un juego con el que se desarrolla la motricidad gruesa del niño, ya que tiene que desplazarse para que gire la rueda, además de trabajar también la coordinación óculo-manual; dependiendo de la velocidad, la rueda gira más o menos deprisa.
Hay algunas más modernas que lucen al girar. La nuestra es la sencilla, la de toda la vida.
Este tipo de ruedas, normalmente se compran en puestos ambulantes en las fiestas de pueblos y ciudades. En estos puestos además, venden otros juegos típicos como molinillos, globos de helio, martillos, silbatos…
Esta rueda, concretamente, la compramos el verano en que Martín cumplió un año, en las fiestas de agosto de Biescas, y Martín juega mucho con ella corriendo por el pasillo de casa.
En la situación actual, es una pena que los niños no puedan ir a las ferias, ya que todos tenemos buenos recuerdos de lo bien que lo pasábamos cuando éramos pequeños disfrutando en ellas.
