Se acerca una de las fiestas que más gusta a los niños, Halloween; disfraces terroríficos, dulces escalofriantes, calabazas que dan miedo, decoraciones ambientadas… son algunas de las características de esta festividad.
Para ir ambientando la celebración a lo largo de la semana, además de las actividades que han realizado en el colegio (biblioteca de libros de miedo, manualidades y bailes), en casa también hemos decorado nuestra puerta para “asustar” a los que nos visiten.
Para hacer la decoración hemos utilizado una lámina de goma eva negra, un lápiz, unas tijeras y cinta adhesiva.
Con el lápiz hemos dibujado, previamente, las partes de la cara (ojos, nariz y boca) y a continuación las hemos recortado con las tijeras. Por último, con la cinta adhesiva enrollada, hemos pegado las piezas en la puerta, haciendo la composición.
¡Esperamos no asustar demasiado a nuestras visitas!

Qué chuli!!!
Me gustaLe gusta a 1 persona