Uno de los pueblos que visitamos durante nuestra Semana Blanca por el Valle del Baztán, fue Erratzu.
Este apartado, tranquilo y privilegiado lugar, está ubicado al Noreste del Valle, junto a Arizkun, Azpilkueta y Amaiur y se encuentra rodeado de voluminosas montañas. Cuenta, además del núcleo urbano, con los barrios de Iñarbil, Gorostapolo e Iñarbegi, sumando en total unos 650 habitantes.
Se encuentra situado al pie del puerto de Izpegi, fronterizo con Francia y ofrece al visitante múltiples atractivos, entre los que destacan los palacios de Iriartea, la Casa Palacio Etxebeltzea o el Convento de las Siervas de María.
La iglesia, del siglo XVIII y dedicada a San Pedro, tuvo que ser reconstruida y reamueblada después de la tromba de agua de 1913, que arrasó la villa y partió la iglesia en dos mitades. Tiene un pequeño claustro de arquitectura popular.
Para los amantes de la naturaleza y el montañismo, en dura ascensión se alcanza la cima de Autza (1.306m), que ofrece una incomparable panorámica de estas tierras y aún otras más lejanas, y entre cuyos repliegues nace el río Baztan, luego Bidasoa.
Pero si por algo es conocido este pueblo es porque es el lugar de partida de la excursión que lleva hasta la Cascada Xorrosín, muy conocida en la zona por su belleza.
¡Maravillados con el valle del Batzan!
