Nos apetece recordar que justo hoy, hace un año, estábamos celebrando con amigos el cumpleaños de Jorge, aprovechando la inauguración de la temporada de Txots, en la zona de Astiagarraga, en Donosti.
Hacer planes con amigos siempre ha sido una de nuestras aficiones favoritas, y es por ello que, en este momento tan complicado, lo echamos muchísimo de menos.
Todos los años marcábamos un fin de semana en el calendario para hacer una escapada con amigos, y el destino solía ser País Vasco o Navarra, y normalmente visitábamos una sidrería.
¡Qué risas nos echamos siempre brindando junto a las Kupelas!
Y si además añadimos el buen ambiente que se crea en las sidrerías, el plan siempre acababa siendo de diez.
En la actualidad, la cultura de la sidra nos ofrece uno de los acontecimientos socio-gastronómicos más importantes de todo el País Vasco, la época del Txotx. Esta época empieza con el nuevo año y termina aproximadamente en el mes de mayo. En enero las kuadrillas, familias y empresas abarrotan con sus visitas las sidrerías del País Vasco esperando degustar la nueva sidra de la temporada.
En las sidrerías del País Vasco se come en mesas corridas y en la sala contigua es donde se encuentran las kupelas con la sidra. En algunas, incluso se come de pie. El menú típico de sidrería se compone de tortilla de bacalao, chorizo a la sidra, bacalao con pimientos, chuleta a la brasa y de postre, queso con nueces y membrillo.
La época de sidrería, es una experiencia gastronómica que va más allá de darle un placer al paladar; es toda una tradición vasca que ayuda a conocer mejor su cultura y a entablar conversación con personas autóctonas. Además, por sus ubicaciones en zonas rurales, es una excusa ideal para conocer preciosos pueblos vascos del interior.
¡Ojalá al año que viene podamos juntarnos otra vez en torno a una mesa de una sidrería!
